Estás en:
18/2/2019- La Comunidad de Madrid está impulsando distintos proyectos orientados a la innovación del transporte público de la región, como la Estación 4.0, que permitirá desplegar en la línea 8 del suburbano la estación del futuro. Así lo ha señalado hoy la consejera de Transportes, Vivienda e Infraestructuras, Rosalía Gonzalo, durante su visita a los laboratorios tecnológicos de movilidad digital de Alstom España, una de las empresas internacionales líderes en el sector del transporte dedicada al diseño, desarrollo y suministro de sistemas, equipos y servicios ferroviarios.
Dentro de la constante renovación que experimenta el sistema de transporte público de la región, que transporta cada año a más de 1.500 millones de usuarios, Metro de Madrid está acometiendo una completa transformación tecnológica global con el objetivo de diseñar la estación del futuro. Este proceso se está llevando a cabo en el Centro Tecnológico de la Estación 4.0 (CTE), ubicado en el recinto de Canillejas, donde se prueban y se homologan los nuevos productos comerciales que posteriormente podrán presentarse a los concursos de Metro para renovar las instalaciones de las estaciones.
La consejera explicó que en este Centro de Tecnologías de la Estación 4.0 se trabaja en tres ámbitos: información al viajero, seguridad y telemando de estaciones (control de las instalaciones de una estación por parte del personal de la propia estación a través de un dispositivo electrónico), todo un despliegue de tecnología que se estrenará en la línea 8 de Metro.
La transformación digital no incluye únicamente el espacio físico de las estaciones, sino que también implica la construcción de un nuevo Centro de Procesamiento de Datos (CPD) y Centro de Control de Operación de Red (CCOR), que sustituirá al actual Puesto de Control. El futuro CPD será el contenedor de la información que genere Metro de Madrid, ya sea de clientes, instalaciones u operación. Con 6.000 metros cuadrados también estará diseñado para tener una alta disponibilidad y tolerancia a fallos, seguridad y un posible crecimiento para las dos próximas décadas. Todas estas nuevas infraestructuras conseguirán que Metro siga siendo un referente mundial y apuntalarán el liderazgo del sistema intermodal de transporte público de la región, el tercero más utilizado de todo el mundo.