La Comunidad de Madrid ha convertido a todos los intercambiadores de transporte regional en espacios cardio-protegidos, al instalar en todos ellos desfibriladores semiautomáticos y realizar de manera continuada la formación de todo el personal que trabaja en estas infraestructuras en técnicas de rehabilitación cardio-pulmonar.

Por este motivo, el Consorcio Regional de Transportes de Madrid ha recibido el premio 2013 de la Asociación “HC Segunda Oportunidad”, en reconocimiento a las iniciativas adoptadas por este organismo ante la posibilidad de una intervención de salvamento para una persona en parada cardiaca.

Hay que tener en cuenta que los intercambiadores son lugares de gran afluencia de personas, usados anualmente por 234 millones de viajeros y donde una actuación rápida del personal de la infraestructura puede salvar a un ciudadano de una parada cardiaca.

Así, los empleados de Plaza Castilla, Avenida de América, Príncipe Pío, Moncloa y Plaza Elíptica reciben cursos específicos para realizar las primeras tareas de auxilio y el uso de los desfribriladores semiautomáticos existentes en estas instalaciones, debidamente señalizados. El director gerente del Consorcio Regional de Transportes de Madrid, Jesús Valverde, acudió hoy a comprobar el desarrollo de esta formación en el intercambiador de Plaza Elíptica, donde asistió a una demostración práctica.

El director gerente del Consorcio Regional de Transportes de Madrid, Jesús Valverde, en el intercambiador
de Plaza Elíptica, donde asistió a una demostración práctica.

En total, cerca de 80 empleados han recibido enseñanzas básicas de cómo actuar en caso de una emergencia cardiaca en el interior de los intercambiadores. Los asistentes a estos cursos aprenden a detectar cuándo una persona requiere asistencia sanitaria urgente y cuándo no; cuándo es necesario alertar al personal sanitario y qué datos aportar; ser capaces de enfrentarse con una serie de técnicas básicas y sencillas de reanimación y saber utilizar la desfribilación como herramienta fundamental para salvar a una persona víctima de un fallo cardíaco.

Protocolos con SAMUR
Valverde destacó que los intercambiadores han sido las primeras instalaciones del sistema de transportes cardio-protegidas y reiteró su compromiso para que sigan siendo un referente en este ámbito. Así recordó los protocolos especiales que estas infraestructuras mantienen con SAMUR Protección Civil para atender cualquier emergencia.

De esta forma, en los propios intercambiadores se han habilitado espacios de estacionamiento exclusivos para las unidades móviles sanitarias y se ha implantado un modo de aviso y comunicación directo entre el puesto de mando del intercambiador, el Centro Integrado de Transporte (CITRAM) del Consorcio de Transportes de Madrid y SAMUR.

“Hasta el momento –confirmó el responsable regional- no ha sido necesario utilizar ningún desfibrilador en los intercambiadores, pero, no por ello, vamos a dejar de trabajar para que estos espacios sean seguros y poder ofrecer toda la ayuda posible en caso de una emergencia sanitaria”.

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