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Para utilizar la tarjeta, es preciso cargar un título de transportes válido y que se corresponda con el viaje que se pretende realizar. La validación es obligatoria en los lectores señalizados en los equipos de acceso de los diferentes operadores.
Se pueden cargar hasta tres títulos diferentes en la misma tarjeta.
La Tarjeta Transporte Público Personal deberá presentarse en buen estado de conservación a los agentes de inspección del Consorcio Regional de Transportes de Madrid y a los empleados de las empresas operadoras que así lo soliciten, junto con alguno de los documentos que sirven para acreditar la identidad (DNI, pasaporte o permiso de residencia).
Ante una utilización irregular, los mencionados agentes podrán proceder a la retirada de la tarjeta. En ese caso, el usuario no podrá solicitar una nueva hasta que se resuelva el expediente de retirada, procediéndose a la devolución de la tarjeta una vez aclarada la situación o satisfecha la sanción correspondiente.